Tu olor está en mi ropa, dejaste una marca no sólo en mi ser y fantasías, sino también en algo físico, material; lo cual corrobora que estaba en lo cierto: lo que viví fue real, no un sueño.
Mi felicidad fue tan absoluta, que me cuesta aceptar que alguien se pueda sentir así, o más bien que yo pueda pensar que alguna vez sentí así. Pero sí, sentí eso, ese sentimiento se albergó en mi cuerpo por días, y ahora eso mismo, se esfumó. Se fue, sin más. Me dejó abandonada y en la peor duda, que es saber si voy a poder repetir está experiencia del mismo modo, otra vez.
Me acerco a la prenda y huelo. Aspiro y me lleno de tu esencia mezclada con la mía, una combinación tan pura, y confieso: irresistible y tentadora.
Un sonido se puede mantener, se puede grabar; una imagen también, se puede transformar en una foto; pero un olor? no puedo almacenarlo más que en mi memoria... espero que no falle y recuerde a la perfección el tinte.
No entiendo por qué no pasó, por qué no colisionamos. Pero tengo la esperenza, la estúpida certeza de que si nos volvemos a ver, sí va a pasar. Sí vamos a ser. Y me llena de fe, hace que se cree un globo en mi interior que se expande hasta abarcar cada célula de mi piel Actúa, estimulandolas, haciendolas creer, haciendolas saber que sí.
No me queda más que esperar. Vas a llegar?
Espero desesperadamente que me visites.
1 comentario:
Si no sos la primera persona que me lo dijo, pero no tengo tiempo corazon, ademas me tengo que inspirar, tiene que surgir.
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