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Sabés qué? Hoy me acordé mucho de vos porque me mandé la típica cagada adolescente que vos me enseñaste a no lamentar, como aquella vez, en el Mc (te acordás?). Así que todo el día de hoy lo pasé con algo de resaca y extremadamente nostálgica, por Merlo, por el estudio, por el pasado, por vos... Estuve muy tentada de llamarte, de gritarte que te extrañaba y pasar horas pegada al teléfono como hacíamos antes, pero no quería molestarte, acabás de llegar de la costa y lo peor que te puede pasar es tener que fumarte mi vos histérica en tu oído.

En fin, no sé para dónde va todo esto, en qué sentido orientarlo; lo que sé es que te extraño, mucho más de lo que te imaginás y me imaginaba. Y me hacés demasiado falta, quiero joder con vos, cagarme de risa, hablar de tus pibas, de mis pibes, tomar algo, conocer gente y darte ese abrazo que tengo reprimido desde hace tanto.
Cuándo fue la última vez que nos vimos? El Mc... y me vino tan bien lo que me dijiste, que me hayas bancado así; porque esa simple frase de "Somos adolescentes, necesitamos mandarnos cagadas" hoy me ayudó en todo el día.

Estoy francamente orgullosa de decirte que no me arrepiento de nada de lo que hicimos, pasamos, discutimos, reímos y puteamos. Gracias (una vez más) por todo lo que me diste y por tus apariciones súbitas en los últimos meses, gracias por no olvidarte de mí.
Te quiero, y realmente lo digo: te quiero.
Tu mejor prima (hope so)